miércoles, diciembre 27

Cronos

Between the lines I get it


No, uno no se despierta a la mañana siguiente como si los últimos 2 años no hubieran sucedido. Uno se levanta con un nudo en el estómago, queriendo que lo sucedido el día anterior hubiese sido producto solamente de la imaginación, la ingesta excesiva de calorías y la falta de sangre en el torrente sanguíneo.

Pero después de 2 nanosegundos; que es el tiempo que pasa entre que abres los ojos, pides tu deseo y regresas a la realidad; llega el momento de afrontar tu triste y relativamente nueva realidad.

Pero no todo es triste, tal vez puedas usar tu "tiempo libre" para actualizarte y volver a ver a tus amigos que has tenido hasta cierto punto olvidados. Pero HEY!, ellos también han continuado con su vida, algunos tienen novias, esposas, oficios o mil pendientes y actividades que ya no cuadran con tu nueva agenda.

Aún así tratas de encajar por pocas en la vida de todos, porque el único que tiene que volver a encajar eres tú. Estas como engrane que no encuentra su ritmo con el resto, que no ha logrado encajar, porque realmente no sabes si quieres hacerte de una vez a la idea de que tienes que encajar. Así van a pasar los días, hasta el momento en que cansado de no estar a 100% en el ritmo de la maquinaria... cedas.

Y lo malo no es ceder o no, el hecho que da vueltas por la cabeza es que te conoces a ti mismo, y sabes que una vez entrando al ritmo es más difícil salir de él. no porque no quieras, sino por que esa maquinaria tiene una función primordial... Crearte una zona de confort, la cual es difícil que quieras dejar.

Y así, entre mensajes que no deberías mandar, respuestas que nunca llegan, mail que no sirven de nada y llamadas que son como una dotación de O2 a una chispa que esta ahí, siempre ha estado y sabes que podría siempre estar... esperas que el Dios Cronos se apiade de tu alma y pase más rápido.

Porque tú sabes que el tiempo... termina con los pesares que ahora no te dejan enfocarte.