viernes, julio 14

Un viernes cualquiera

Algo ha cambiado, el sol brilla con magnificencia y refleja hasta el más mínimo detalle del mundo que me rodea, las cosas parecen más pequeñas y todo se ve desde otra perspectiva.

La miro y la veo diferente, su sonrisa se parece a la mía, hace tiempo que no la veía tan feliz, solamente por saber que me siento bien. Me celebra, ella sabe que no lo tiene que hacer, pero HEY!, el mundo se ve más definido que de costumbre.

Me dicen que me veo muy bien, y yo les digo que ahora veo las cosas mejor, desde otra perspectiva, soy feliz, y el mundo se aclara ante mis ojos.

Hoy no solo dejo de trabajar aquí… cambié mis gafas por unas que se acomodan mejor a mis deficiencias visuales.