Houston… 1st night

Amarisho pasó por nosotros, aunque al final Ponzo prefirió llevar su coche. 30 minutos después y 2 vueltas incorrectas ya estábamos en Blvd 610, 10 USD de cover por persona y un antro que pintaba para llenarse de latinos no me estaba haciendo tan feliz.

Pero yo tenía actitud no solo fiestera; y el vodka nunca me falla. Tonic please. Baile y más, incluso Chikito (un personaje más de la casa) estaba ya platicando con Chiwa (oriunda de Chihuahua y amiga de Puelto Lico). Bailé un rato y siguió la ingesta alcohólica. Amarisho tenía una misión en la vida y al final consiguió que explosionara mi actitud y terminara con un nivel de alcohol mucho más elevado que el permitido para manejar equipo pesado.

La niña con actitud de la mesa de un lado “se me quedaba viendo”, y yo, con la actitud que tenía no estaba para desperdiciar las señales. 4 jinetes fue el nombre de mi perdición. Blackout semi instantáneo después de la ingesta. Hoy tengo memorias vagas de momentos relevantes del resto de la noche.

Me recuerdo saliendo del antro, recuerdo a mis amigos encontrándonos; lo demás lo cubre un manto de niebla e incertidumbre.

Have we kissed? Es algo que no podría preguntarle, pero estoy seguro que lo hice y no lo hice; y una vez mas, la paradoja de Schrödinger me persigue; aunque esta vez las leyes de la mecánica cuántica no apliquen dado que mi recuerdos más latentes sean besándola y no haciéndolo.

Y así, con comentarios de: “¿se atascaron?”, "desde esa distancia no podría asegurarte ni lo primero ni lo segundo”, “yo digo que si”… dejamos de lado las posibilidades y cualquier teoría posible, hoy partimos del supuesto físico de que si no tenemos evidencias irrefutables la hipótesis no podría ser afirmada categóricamente, ergo, nothing happened (aunque creo que ella tiene fotos).