Solo fue un fin de semana

Este fin de semana me hizo recapitular, recapacitar y entender, que mi vida necesita regresar al orden al que estaba acostumbrado. Mi cuarto no puede estar más desordenado; debajo de mi cama no cabe ni un alfiler (ok, exageré, pero creo que les quedó claro). Es más, a Lucesito no le había cambiado el agua en semanas. Y no les contaré que tiene un buen rato que no mando a lavar mi coche.

Y además, no tuve suministros de golosinas este fin de semana. Solo las gomitas que mi novia no se pudo comer en sus últimas visitas. Una razón más para que no fuera el fin de semana perfecto.

Pasaré mi noche del domingo… tratando de ponerle orden a mi cuarto (para empezar)… tengan por seguro que les iré contando como se va enderezando y volviendo a su cause natural mi vida.