Sunday morning
Desperté temprano, tal vez por haber dormido en el sofá de la sala y que las ventanas dejaban entrar al 100% los rayos solares. Si me han leído un poco, saben que me resulta imposible mantener el sueño si no hay oscuridad total.
Mi mamá fue a desayunar y yo me quedé en casa, me fui a mi cuarto y puse las carreras de la F1… Odio que los corredores pierdan por culpa de sus paradas en los pits. Pero bueno, al final si es un trabajo de equipo y todo el equipo tienen que ganar.
La novia de Milky me cayó perfecto; me dio risa que de pronto hacía comentarios y se quedaba callada buscando la reacción de los demás en espera de aceptación. Me reclamó haberla llevado al antro sin el outfit adecuado.
De este cumpleaños de mamá, me faltó la tradicional ida al boliche con ella. Me da un it severo no saber si le voy a volver a ganar jugando ese juego; y ella se emociona diciendo que se llevó la última victoria. Supongo que lo hace para que deje de pensar en eso.
El domingo no fui a correr; y por causas de fuerza mayor hoy tampoco iré… el universo conspira para que no logre la meta de 40 km de la semana. 6.66 k.m. por día si voy el resto de la semana.
Ayer entre los pensamientos random abordé el tema de los diferentes índices de correlación a los que estamos vinculados. Escribí un tweet sobre eso y lo dejé rondar por mundo. No se si algún día habrá una respuesta con el valor de r, pero estoy seguro de que “el número tiende a 1”.
La vi, random… mientras hacía el súper. Todo estaba normal, entre mis amigos y yo bromeábamos y de pronto los sentí un poco incómodos. Alguno de ellos se acercó a mi oído para decirme que ella estaba detrás de mi. Mi estómago implotó y desapareció todo lo que había comido 15 minutos antes.
Al voltear, la saludé... desde lejos y tal vez con la sonrisa mas mensa del mundo mundial; como cuando tu mamá te decía: no vas a saludar a “(Inserte aquí el nombre de su crush de la primaria)”. Entre nervioso y sin saber como debes reaccionar. Necesité caminar 20 metros para tomar valor. La esperé, de todas maneras íbamos al mismo lugar y la saludé como se debe. Ahora se que fue un pretexto para abrazarla un poquito.
Mi mamá fue a desayunar y yo me quedé en casa, me fui a mi cuarto y puse las carreras de la F1… Odio que los corredores pierdan por culpa de sus paradas en los pits. Pero bueno, al final si es un trabajo de equipo y todo el equipo tienen que ganar.
La novia de Milky me cayó perfecto; me dio risa que de pronto hacía comentarios y se quedaba callada buscando la reacción de los demás en espera de aceptación. Me reclamó haberla llevado al antro sin el outfit adecuado.
De este cumpleaños de mamá, me faltó la tradicional ida al boliche con ella. Me da un it severo no saber si le voy a volver a ganar jugando ese juego; y ella se emociona diciendo que se llevó la última victoria. Supongo que lo hace para que deje de pensar en eso.
El domingo no fui a correr; y por causas de fuerza mayor hoy tampoco iré… el universo conspira para que no logre la meta de 40 km de la semana. 6.66 k.m. por día si voy el resto de la semana.
Ayer entre los pensamientos random abordé el tema de los diferentes índices de correlación a los que estamos vinculados. Escribí un tweet sobre eso y lo dejé rondar por mundo. No se si algún día habrá una respuesta con el valor de r, pero estoy seguro de que “el número tiende a 1”.
La vi, random… mientras hacía el súper. Todo estaba normal, entre mis amigos y yo bromeábamos y de pronto los sentí un poco incómodos. Alguno de ellos se acercó a mi oído para decirme que ella estaba detrás de mi. Mi estómago implotó y desapareció todo lo que había comido 15 minutos antes.
Al voltear, la saludé... desde lejos y tal vez con la sonrisa mas mensa del mundo mundial; como cuando tu mamá te decía: no vas a saludar a “(Inserte aquí el nombre de su crush de la primaria)”. Entre nervioso y sin saber como debes reaccionar. Necesité caminar 20 metros para tomar valor. La esperé, de todas maneras íbamos al mismo lugar y la saludé como se debe. Ahora se que fue un pretexto para abrazarla un poquito.